A lo lejos el horizonte, aún por despertar, perfila los contornos de su sueño, mientras alumbra el sol las cepas cercenadas e invierte en racimos su luz. Es arriesgado, es un momento en que las hojas de los pinos son agujas punzantes y la sangre amarilla; pero preciso ,porque, el tendido eléctrico nunca conseguirá amanecer el alma. M. Foto Pepe Laguardia.
Un blog de poesía para tod@s.