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Mostrando entradas de 2013

Palimpsesto

Mi corazón es un palimpsesto. Aunque  vuelva a escribir encima sigue impreso lo sentido. Puedo así recuperar emociones que en algún momento lo marcaron también la clave de sol en sus latidos.  
Prefiero  Prefiero ser ola impetuosa aunque choque contra un acantilado que agua  empantanada de engañosa transparencia. Prefiero deshacerme en espuma a tener un poso cenagoso que atrape mis entrañas. Prefiero asustar con mi voz a los pájaros que ser reflejo del cielo , sólo, cuando calla el viento.
 Bombardean mi presente las instantáneas del recuerdo. No hay relojes  para el dolor del corazón  Ellas vuelven  como las nubes,    mientras los árboles se mueven sin autonomía,  y en silencio.  El viento habla por ellas.
Llévate río mi reflejo al mar para que el salitre cure mis heridas de guerra. El pasado es una jaula con la puerta forzada y yo quiero que mis orillas   sean playas sin rejas.
El amanecer es una mestruación que hacer fértil el día, tiene rostro de mujer y alma. Alma que calla, sufre, se apasiona... ¿ Quién se atreverá a violar su calidez? Está de luto la catedral de sus anhelos sólo es una silueta de si misma. Vuelve un día más que vivirá en las ascuas

Te echo de menos.

Te echo de menos hada buena, loca de vida, empedernida idealista, niña eterna. Te echo de menos aunque yo se que estás contando las estrellas y admirándote de los secretos que la eternidad nos guarda. Debí exprimir más el tiempo contigo. No pensé que te fueras a ir tan pronto; se te veía débil pero como un sauce. Te quiero Madi, guárdame  un sitio a tu lado  quiero pasar la eternidad riendo. Para Marisa de Milagros. Foto Mady. 
Hay brumas en el cielo y los pájaros prefieren las higueras. Mal día para los altos vuelos.

Agosto 1937

Agosto  1937 Vivieron  como ratas el  asedio  brutal,    en las bodegas y  en los túneles  que comunicaban las calles, ,mientras fuera, las bombas,  explosionaban. Los niños lloraban de sed y de hambre,   las madres ya tenían secos  sus senos  de lactancia, los ancianos no hablaban y las mujeres desgastaban  cuentas  de rosarios. Nadie entendía lo que acontecía ¿ Acaso  se  puede entender  la guerra? Ellos eran  el blanco de la diana, el epicentro, y sólo usaban la hoz  para segar espigas..

In memoria

He encendido una vela y he quemado incienso para ver si ,de una vez para siempre,  encuentras el camino hacia la felicidad . Me duele el río inmenso que nos separaba en constante crecida, con aguas turbias que arrasaban árboles inocentes. Pero no se eligen los márgenes a ellos nos lleva la vida. Te veo ahora joven y riendo al lado de tu primer amor, viviendo los primeros días de enamorada, y pienso que ese es tu cielo. El único cielo que has sentido viva.
En la tulipa de la lámpara encendida hay un cementerio  de mosquitos: la luz mata el picor de las tinieblas. Hoy me enciendo para que no se me llene de veneno la sangre . Por ti muero  pero por mí vivo.
Cuando pienso un lugar en el que me gustaría estar, no se me ocurre otro mejor que en tu mirada. Esa mirada dorada que me recuerda   a las gotas de agua   en la arena de la playa que   dejan las olas al atardecer. Nuestros ojos ríen cuando nos miramos y yo me siento en una isla solitaria en que no necesitamos ni siquiera tocarnos . La fuerza de nuestros ojos es bastante para que nos sintamos en el lugar perfecto.
Silencio:  silencio que calla,                                      silencio que habla,                                                                                                                                                                        silencio que oculta, silencio que descubre,                                               silencio  que confunde,                                                                                               silencio que aclara. Silencio que escucha                                                   Silencio que no oye.                                                                                                Silencio buscado.                                                  Silencio  encontrado                                                                                                                                                                                                             
Ya el trigo reposa  en el granero, y por  rastrojos los pájaros buscan los granos extraviados. El ciclo parece concluido, la tierra  se percibe estenuada. Solamente  girasoles hacia la luz giran. Pero   hoy  el cielo está nublado Foto Goyo Hueso.
A veces cuando me quedo  conmigo misma a solas me adentro en una caverna sombría  y sin aire y me siento tan sola que me duelen los ruidos y lloro cuando escucho las canciones. Me siento partida sin encontrar el nexo que me una. y  hurgan en mi memoria los recuerdos como  si fueran espectros del olvido arrastrando ruidosos eslabones -en mis suelos rayados- que desvelan mis sueños. Foto Goyo Hueso. 

Como un liquen

Creí que éramos como un liquen tal era la simbiosis que a tu lado sentía. Tú me protegerías de  desecación    radiaciones solares, y yo te adoraría con mi fotosíntesis. Así viviríamos en las piedras superando la climatología. Que ilusa soy a veces sembrando mis esporas sobre el barro
Solo una chaqueta tengo , por eso, a veces me siento ajusticiada;  me hace daño, pero qué sería de los ríos sin rumor. A estas alturas de la vida -en que nada me han dado- no está condicionada mi opinión al amor,  al pan, o al silencio. Soy como soy.
" Mis poemas son cojos, ciegos, mancos, pero y o los quiero ( Elena Peralta) He decidido querer a mis poemas aunque sean sordos , ciegos,  mancos, cojos, porque no amarlos seria genocidio,  violencia de género y rechazo;  como si fueran  sin papeles, prostitutas o presos. También porque en ellos perviven esas   sensaciones  previas a un big bang  placentario, y porque mis versos son como colores que enriquecen la piel  cuando la desnudan. Además porque yo -como ellos-  soy coja, ciega,  sorda , manca,  blanca , negra,  incurable, errante, extranjera ,mujer , cautiva y libre.

En mi maleta vieja.

 Guardo cuentos en mi maleta vieja memorias en desuso y algún que otro  objeto desfasado, los trajes de paseo que ya no me envuelven y  escurridos pañuelos  de llorados  adioses. En el armario del pasado de la humilde cabaña que es  mi vida la guardo, para evitar  su extravío. Forman parte de mí sus pertenencias  aunque ya no me sirvan. Así con todo en orden, me siento mas liviana y consigo volar atardeceres.  Foto Goyo Hueso. 

Resaca.

Soy nuevamente una esponja marina que una ola llevó mar adentro en danza  de arena  a un fondo atormentado . Tu barca se  va, y vuelve  desorientando la oleada; luego la arrimas a buen puerto y  soterrada me  abandonas.

Certeza

Hiere la noche  todos los ocasos pero  no  funde  la luz de  cada amanecer; esa certeza me hace  desechar  energías prestadas. Para  arder  recurro a  mis rescoldos.

En mi otoñal sustrato.

En mi otoñal sustrato hoy crecen  ilusiones que reflejan su sombra en la hojarasca. Aún tengo presente el invierno   de mis ramas desnudas  y  es imposible recuperar ahora palomas mensajeras, que traigan respuesta a mis  latidos; pero esas pequeñas plantas, que   brotan, hacen que me sienta nuevamente bosque.

Espuma de ola.

Tu espuma de ola intermitente invade mis pasos en la playa. Luego te vas dejando húmedo el hueco de mi estómago y salado es de nuevo mi destino. Foto Roque Soto.

Evolution

No es que me haya marchado le han crecido dos ramas al camino y elegimos la nuestra. Fue  hermoso  compartir varias etapas y oler las mismas flores pero ahora hay abejas No es nada personal es que evolucionamos. 
Mi vocación no es de árbol milenario  con mi sombra, a la espera de que llegues cansado del camino ni velar a mis hojas ni ser sostén de nieves. Me he dado tanto que estoy extenuada, ya no me importa tener copa ni brisa ni estorninos. Me duele la presión de mis raíces cuando solo retienen un puñado de tierra.
Vamos a ese lugar  al que solo se llega con un beso, a ese paraíso sin límites,  distancia ni horas. Allí edificaremos el amor sin ladrillos resistente a tornados Vamos. No importa que anochezca es intangible el suelo que pisamos; será brújula la luz de nuestros ojos

Metamorfosis del instante.

No le temo al olvido, he descubierto que tiene las manos ocupadas y es  buen amigo de la evolución. Un gran espejo donde me descubro  a mi misma y me cercioro de que nada  es tan  fuerte como para tenerme. Solamente  soy metamorfosis del instante.   

Cómo

Cómo convencer a mi corazón  para que suelte el lastre y así volar con él.  Mirar la vida con distancia y no sufrir más  el desasosiego de girar en remolino, sobre la misma causa, una y mil veces, hasta quedar sin la conciencia exacta para salir yo sola del dolor que me habita. De qué manera puedo persuadirlo para que deje de contar espinas de esos tiempos que fueron y comenzar de cero. Mi corazón es niño que se queda mirando  un pastel y me olvida.

La dramaturgia sigue.

Me siento como si  este  decorado  donde   actúo, fuera a desmontarse en cualquier momento y el escenario se quedara vacío; solamente  con el telón bajado y con  las bambalinas que ocultan la experiencia. Y comienzo  a desprenderme con calma ya no me sirven todos los  personajes que interpreto; . Nacemos y morimos entre  aplausos,  la dramaturgia sigue.
En el viejo molino habitado por años,  hierba oculta los restos del camino trazado. En el viejo molino se siente aún el pasado repleto de los ecos de chiquillos jugando. Marineros de río son de juncos sus barcos y ellos corren tras ellos por la orilla descalzos. En el viejo molino ya no habita el verano, ni el olor a pan tierno, Todo se ha desconchado. La historia a los sencillos nos trata cual bastardos.

Eternidad.

 Recógeme  entre  vivos lejos de telarañas,  coronas de  cadáveres o sillas invadidas por el polvo de siglos. Recógeme en los primeros brotes de la higuera. Recógeme en la belleza que nace de dentro, entre la estima, detrás de mi sonora carcajada. Mi eternidad  instante - como cuando se juega- Recógeme  en  abrazo tibio.
Huiré de toda  naturaleza  de diseño   y viviré silvestre; con la  misma intensidad con  que viven   las  montesas encinas -reflejada en el brillo de sus menudas  hojas- ajenas  a la contaminación de  ciudades. Disfrutaré del  sonido del río , el canto de las aves y al zumbido de las abejas alrededor del polen.. La visita del aire traerá  esencias conocidas.; lo demás me quedará lejos ,  de largo pasará En  lecho de  glacial enamorado,   hallaré mi lugar. Foto Goyo Hueso.
Confusión Todo retorna: El banco sin sombra, la espera vacía, la palidez del árbol, la realidad distorsionada. No se que hacer ante el cielo verde sin pastos que me nutran. Como un circuito que se repite vuelven los fantasmas con cuchillos y mis laderas se llenan de amapolas. Milagros Morales. Foto. Goyo Hueso.

Duendes en la arena.

En la  arena  vivimos la pleamar  desatada con un exceso de hervor. La victoria del mar intenta  adivinar nuestra mirada, nuestra actitud, nuestro semblante; pero somos duendes en la arena  hijos de noches  con faros apagados, con ansias contenidas, con lujuria salada que  surfea alboradas amargas. Gracias por leerme. Foto Goyo Hueso.

Con un hachazo

Foto Goyo Hueso.

Ser violeta.

Ser violeta , nacer entre las zarzas en este abril extraño donde la nieve con la flor convive, y los corazones se vuelven piedras que laten con el agua del deshielo. Es inútil limpiar el cristal de la ventana, pero florecen los manzanos, y hay paisajes aún vírgenes  con silencio  donde la vida se oye  hacerse  y los charcos de arcilla son espejo.  Gracias por leerme
Estos tiempos nos expulsan como a las cigüeñas de las torres. Intentamos perpetuar nuestra especie fabricando los nidos sobre postes de alta tensión sin tener la seguridad de  que esto hará a nuestros polluelos inmunes a descargas. Vivimos el final de algo que caerá sin suelo,  ante un horizonte  perfilado con  dilemas. No tenemos más presente que hoy  y  una luz interior que hace espejo a  este  cristal con lluvia. Gracias por leerme. Milagros. Foto Goyo Hueso

Dicen que llegó la primavera.

Dicen que  comenzó  la primavera  y si así  lo proclaman  será cierto, hemos vivido un invierno floreado y también nevó en las flores  del almendro. Parece que así ,  las estaciones hermanadas,  compartieran entre ellas   su abundancia Han aprendido antes que el humano   a equilibrar la balanza. Dicen que la primavera llego ayer y yo cuando se fue no lo recuerdo. ¡ Que importa el tiempo  que sea para ser ! Gracias por leerme.