El verano llega con tanta fuerza que desintegra las nubes y la siega despoja al secano de la vida. Las ontinas, el orégano el hipérico, junto a la miel en rama intentan perfumar -a modo de incienso- el olvido de los pájaros . Las cerezas tiemblan. Foto Goyo Hueso.
Un blog de poesía para tod@s.