Cómo convencer a mi corazón
para que suelte el lastre y así volar con él.
Mirar la vida con distancia y no sufrir más
el desasosiego de girar en remolino,
sobre la misma causa, una y mil veces,
hasta quedar sin la conciencia exacta
para salir yo sola del dolor que me habita.
De qué manera puedo persuadirlo
para que deje de contar espinas
de esos tiempos que fueron y comenzar de cero.
Mi corazón es niño que se queda mirando
un pastel y me olvida.
Comentarios
Poética pura.
Abrazo.
Fantástico!
Saludos.
Abrazos Milagros
Enhorabuena por tu blog
JERRYN. 16/04/14