Niebla, no intentes confundirme
con tu velo blanco.
con tu velo blanco.
He visto al trigo nacer y sigue ahí,
con una corona de cristal
con una corona de cristal
sobre su cabeza.
No pretendas desviar mi mirada
hacia la desnudez y la poda;
poco a poco habrá una alfombra
que trasformará el barbecho.
Se que es de día:
ya no quedan farolas encendidas.
Foto Milagros.
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Comentarios
Un saludo
Yo también sé que es de día porque el sol está "encendido", y lo dejo entrar en mi corazón.
Precioso poema.
Besitos soleados y diurnos!
;)
Bello todo, amiga. Un abrazo.
Un saludo.
Aquí esas mañanas son tardes de paseo.
Besos
Observar màs que mirar las señales de la vida, es una sabia forma para no desviarse. Una farola hoy puede ser el punto de apoyo, otro dìa podrà ser un aroma, una sombra o un trino.
Tu poesìa es una inspiraciòn en cada verso, me haces soñar con màs.
Muchos besos, Anouna
BESOS
Excelente, Milagros, me encantó la imagen que surge de las metáforas.
Un beso grande :)
Mucho frioooo
Un fortísimo abrazo